
No todo es color de rosa en Victoria, corría el minuto 71, Rubén Botta encaró por derecha, se metió en el área y sacó un tiro blando a las manos del arquero. Pero en esa jugada Salustiano Candia dejó la pierna para golpear al 19 que quedó tendido en el área. Esa misma noche consultados Gorosito y Mastroiani tuvieron fe en que era solo un golpe. Pero el miércoles el diagnostico varió a un posible esquince de rodilla. Sin embargo pasado el mediodía de este jueves se le realizó la resonancia magnética al sanjuanino y esta arrojó la peor de las noticias.
Rubén Botta se rompió el ligamento cruzado anterior y, además, el meñisco exterior de su rodilla izquierda. El jugador deberá ser operado y su recuperación le demandará poco más de seis meses. Lógicamente estará afuera del partido de vuelta por la Copa, ante el conjunto franjeado, el que acusó al matador de patotero y que tiene en su zaga central a jugador capaz romper a un rival, con mala intención, porque como bien dijo Gorosito en conferencia “el que una vez jugó al fútbol sabe que dejó la pierna para golpear”. Para golpear y lastimar, después los patoteros son los demás.
Fuerza Rubén
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