¿La Plata hará la felicidad?
por Leandro Scaviolo
El primer desafío de Tigre en el arranque del Torneo Final será ante Estudiantes, este sábado a las 17. El Pincha bajo la dirección técnica de un ex entrenador del Matador como es Diego Cagna, hará que a priori, el partido sea especial para los de Pipo Gorosito. ¿La Ciudad de las Diagonales será el primer guiño del destino del equipo?
En la búsqueda del equilibrio, de que el plantel justo sea lo más amplio posible y versatil, para las aspiraciones internacionales y domésticas, Tigre tiene que toparse con el primer cotejo ante un equipo que tiene entre sus filas a un ex jugador y entrenador. Román Martínez y Diego Cagna son los hombres emparentados con la camiseta del conjunto de zona norte y que generan un clima especial a la hora de jugar.
La realidad del elenco de Victoria pasa por las incógnitas que tendrá en el ataque. Deberá esperar hasta último momento por una carga en el músculo de su pierna del paraguayo Santander. A esto, la llegada a la 5ta tarjeta amarilla de un ex Pincharrata, Ezequiel Maggiolo. Y teniendo en cuenta la situación de Diego Ftacla, relegado a disputar partidos de reserva, todos los números de la rifa se los lleva Leandro Leguizamón, quién ha mostrado el entusiasmo y también sus cualidades, que le han permitido marcar un gol frente a Anzoátegui en los minutos que ingresó en la ida. El surgido en las inferiores del club tiene todas las posibilidades de quedarse con el puesto para este compromiso, seguramente, acompañado del doble enganche nuevamente, con Pérez García y Rubén "Aladín" Botta.
En el medio de la cancha y en la línea de fondo no se vislumbran grandes retoques por parte de Gorosito, que recalcó que este equipo, está para jugar 3 encuentros en una misma semana. Lo cual es bueno, porque confía en lo que pueden dar y en cómo están preparados, pero también hay que demostrarlo en el terreno de juego. Por último, la figura de Javi García fue destacada por el propio entrenador del Rojo, Américo Gallego, por lo que el hombre surgido en Boca está cada vez mejor, ya que ha tenido un trabajo agitado en Avellaneda, y respondió de manera sobria y segura. Se vieron signos de cansancio en el mediocampo matador el domingo, el mismo cuarteto que bancó la parada en Venezuela, sintió el dominio de un avasallante Independiente, sin tantas ideas, pero con mayor voluntad para ganar el partido.
Tigre no puede seguir empatando, ya no es negocio a estas alturas, cuando todavía resta toda una rueda y el encuentro contra Quilmes, hay 60 puntos en juego, y el Matador debe sacar al menos la mitad para redondear una aceptable temporada. Inevitablemente pelearía el campeonato si llega a esos números, lo cual hará que el compromiso de los jugadores sea aún mayor. Pero no nos vayamos tan adelante. El sábado a las 17.00 en La Plata será el primer escollo, obstáculo, piedra en el zapato, que Tigre deberá sacarse para caminar tranquilo por este Torneo Final, que para el Matador no tiene que ser el desenlace de nada, sino el principio de un año histórico, con una sonrisa de oreja a oreja.
En la búsqueda del equilibrio, de que el plantel justo sea lo más amplio posible y versatil, para las aspiraciones internacionales y domésticas, Tigre tiene que toparse con el primer cotejo ante un equipo que tiene entre sus filas a un ex jugador y entrenador. Román Martínez y Diego Cagna son los hombres emparentados con la camiseta del conjunto de zona norte y que generan un clima especial a la hora de jugar.
La realidad del elenco de Victoria pasa por las incógnitas que tendrá en el ataque. Deberá esperar hasta último momento por una carga en el músculo de su pierna del paraguayo Santander. A esto, la llegada a la 5ta tarjeta amarilla de un ex Pincharrata, Ezequiel Maggiolo. Y teniendo en cuenta la situación de Diego Ftacla, relegado a disputar partidos de reserva, todos los números de la rifa se los lleva Leandro Leguizamón, quién ha mostrado el entusiasmo y también sus cualidades, que le han permitido marcar un gol frente a Anzoátegui en los minutos que ingresó en la ida. El surgido en las inferiores del club tiene todas las posibilidades de quedarse con el puesto para este compromiso, seguramente, acompañado del doble enganche nuevamente, con Pérez García y Rubén "Aladín" Botta.
En el medio de la cancha y en la línea de fondo no se vislumbran grandes retoques por parte de Gorosito, que recalcó que este equipo, está para jugar 3 encuentros en una misma semana. Lo cual es bueno, porque confía en lo que pueden dar y en cómo están preparados, pero también hay que demostrarlo en el terreno de juego. Por último, la figura de Javi García fue destacada por el propio entrenador del Rojo, Américo Gallego, por lo que el hombre surgido en Boca está cada vez mejor, ya que ha tenido un trabajo agitado en Avellaneda, y respondió de manera sobria y segura. Se vieron signos de cansancio en el mediocampo matador el domingo, el mismo cuarteto que bancó la parada en Venezuela, sintió el dominio de un avasallante Independiente, sin tantas ideas, pero con mayor voluntad para ganar el partido.
Tigre no puede seguir empatando, ya no es negocio a estas alturas, cuando todavía resta toda una rueda y el encuentro contra Quilmes, hay 60 puntos en juego, y el Matador debe sacar al menos la mitad para redondear una aceptable temporada. Inevitablemente pelearía el campeonato si llega a esos números, lo cual hará que el compromiso de los jugadores sea aún mayor. Pero no nos vayamos tan adelante. El sábado a las 17.00 en La Plata será el primer escollo, obstáculo, piedra en el zapato, que Tigre deberá sacarse para caminar tranquilo por este Torneo Final, que para el Matador no tiene que ser el desenlace de nada, sino el principio de un año histórico, con una sonrisa de oreja a oreja.
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