La pata derecha del Pato
Se terminaba
el partido, Tigre ganaba 3 a 1 y en la popular norte había fiesta, se
revoleaban las camisetas al último rayo de sol que se filtraba entre el techo
del Ciudad de La Plata. El Matador cosechaba tres puntos en el debut, tres
puntos de visitante, tres puntos dando vuelta un partido por Torneo local
después de casi dos años y la alegría se volvió preocupación.
Martín Galmarini se fue por su sector, el derecho
lógicamente, fue a marcarlos Joaquín Correa, de una manera tan desairada que el
juvenil Pincha terminó dándole un rodillazo a la rodilla derecha del Capitán
del conjunto de Victoria. Siga, siga dijo Saúl Laverni, árbitro del partido y
las miradas se distrajeron por un rato, solo un momento, hasta que Gastón Díaz
la reventó al lateral. Es que el Pato no se levantaba. Creyendo una simulación
el Juez del partido lo hizo ponerse de pie, él con su habitual garra lo hizo y
lentamente, mientras se acercaba el cuerpo médico, salió de la cancha. Finalizó
el partido, todos se abrazaron en el círculo central y los que no estaban
siendo entrevistados se fueron caminando hacia los vestuarios, con la excepción de Galmarini que cruzó al
cancha en el carrito, tomándose la cara. Un cartel de publicidad le impidió la
salida, por lo que se retiró intentando caminar, frenando cada tres pasos,
mordiendo con rabia la camiseta y tanto él como el hincha seguro creyeron que
podría ser grave.
Sin embargo, ya en la zona de camarines las
palabras que llegaron fueron alentadoras. Por ahora es solo un esguince de
rodilla, mañana (por hoy domingo) le vamos a hacer una resonancia magnética para
ver como está. Tranquilidad para toda la
Zona Norte.
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