El análisis de Estudiantes 1 – Tigre 3

El 3 a 1 en La Plata, en el debut en el Torneo Final 2013, dejó muy buenas impresiones para Tigre. Con Botta y Pérez García letales con pelota dominada, y muy firme en todas sus líneas, el Matador ganó su primer partido como visitante desde el final del Clausura 2012 y empezó de la mejor manera el semestre.

El golazo de tiro libre de Marcos Gelabert a los ocho minutos de comenzado el encuentro no hacía más que reforzar la superioridad de Estudiantes sobre Tigre. El equipo de Néstor Gorosito entró muy tibio al campo de juego, los encargados de hacerse cargo del balón no entraban en juego y el Pincha era el claro dominador.

Apenas un par de minutos después del gol rival, Tigre comenzó a crecer en el campo de juego. Una chance de Ruben Botta para empatar fue clave en la recuperación del equipo. El sanjuanino, figura excluyente del equipo en los últimos compromisos, encontró en Matías Pérez García a su socio ideal. Además, Leandro Leguizamón, el elegido de Pipo para ser el único hombre de punta, se juntó muy bien con los dos habilidosos y el trío ofensivo del Matador comenzó a inquietar a Estudiantes.

Así, a los 27’, un tiro libre de Gastón Díaz desde la derecha le cayó en los pies a Botta tras un choque de Lucas Orban con el arquero Agustín Silva. El ‘19’ de Tigre definió por encima de varias piernas y empató las acciones.

Si antes Tigre dominaba la pelota, a partir de la igualdad fue el dueño absoluto. Estudiantes pareció acusar el golpe y dejó de atacar con tanta claridad.

Sobre el final del primer tiempo, otro tiro libre encontró la cabeza de Alejandro Donatti y el ex Boca Unidos, con un frentazo fortísimo, venció la resistencia de Silva y mandó a Tigre al vestuario con un gol de ventaja.

El inicio del complemento no fue muy diferente a los minutos finales del primero. Tigre proponía y Estudiantes, replegado en su campo, disponía. No más habían pasado veinte segundos de juego cuando Leandro Leguizamón estrelló un remate en el palo, que podía haber liquidado el partido.

Un par de intentos de Duvan Zapata, sólo en la delantera Pincha, le obligaron a responder a Javier García, pero sin demasiado peligro.

A quince minutos del final, llegó el golpe de knock-out- Gabriel Peñalba probó desde media distancia, con un remate y al medio del arco, Silva dejó las manos flojas y el remate del volante de Tigre se le escurrió entre los brazos.

Con el partido liquidado, hubo tiempo para que Gorosito le diera algo de descanso a Botta y a Pérez García, teniendo en cuenta el partido que deberá disputar Tigre ante Quilmes, el próximo miércoles en el postergado de la fecha 19 del pasado torneo.

Más que positivo el debut de los de Victoria. La solidez en todas las líneas fue clave en el resultado final. Pudo haber sellado el triunfo mucho antes, pero falló en el último toque.