Por primera vez la reserva de Tigre jugó en el Predio Nito San Andrés y ganó por 4 a 2 ante Atlético Tucumán. Los goles los marcaron Diego Sosa, Walter Mazzantti, Miguel Contreras en contra y Agustín Fidaldo para el local, en tanto que descontaron Leonardo Bustos y Dante Ibarra de penal.
La niebla dela mañana nos daba un sol difuso en Rincón, como para marcar que no era un día más. Por primera vez la Reserva de Tigre se hizo presente en el Predio Nito San Andrés, que estrenó de manera oficial el terreno de juego. Impecable, el verde se escondía bajo el manto del rocío matinal. Alfombra húmeda que se fue borrando con el andar de los 22 protagonistas.
El juego comenzó favorable para los dirigidos por Pablo Pérez, en la izquierda encontraba los mejores claros con Diego Sosa y Brian Oyola, más el aporte de Ignacio Bonadio desde el lateral. Sin embargo las alegrías vinieron por el sector derecho. Apenas 15 minutos de juego un tiro libre desde lejos ejecutado por Diego Sosa cayó con rosca en el área. La bocha vestía el agua del terreno y se escurrió como limpiándose entre los guantes del arquero visitante. 1 a 0 el marcador. Cuenta que amplió Tigre, con una avivada de Walter Mazzantti que apretó en la salida, lo demás fue puro talento de Pochi. Entró en diagonal dejando atrás a sus rivales para definir arriba. El encuentro se tornó algo desprolijo, el Matador recurrió innecesariamente al pelotazo, a pesar de la insistencia de su técnico en que toquen por abajo. Pero nada cambiaría el marcador de la etapa inicial.
Tucumán apretó de arranque en el complemento y ganó una falta al borde del área. Cupón de buena oportunidad al minuto que Leonardo Bustos canjeó por el descuento con un precioso tiro al primer palo. Adentró Agustín Fidalgo por Brian Oyola (táctico) y el debut de Nicolás Santillán por Bonadio (lesionado). Por el sector derecho Mazzantti estaba hecho una fiera, y con sus gambetas retenía la pelota, aunque a veces exageró en la individual, fue fundamental para el equipo. Porque Axel Bordón le pasa permanentemente por la banda y Lucas Modesto se arriba para ayudar. Del otro Lado Monchi Mierez tuvo un partido áspero, duro de pelea con los centrales. Pero en esa lucha ganó la pelota dejó atrás al arquero y casi sin ángulo remató, el tir dio en el palo y Miguel contreras se la llevó por delante en lo que fue el 3-1 para recuperar la tranquilidad. Calma que se completó con el desborde del recién ingresado Nicolás Sánchez, el pase atrás y el gol del Tanque Fidalgo. Sobre la hora llegó un penal para Atlético que Dante Ibarra convirtió rematando a la izquierda de un Lugo que adivinó pero no llegó. Fue final y en el estreno del nuevo césped del Predio Nito San Andrés la Reserva de Tigre ganó 4 a 2.
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